viernes, 26 de diciembre de 2008



El doctor José Gregorio Hernández, el venezolano más popular de todos los tiempos, fue conocido en vida por su bondad, rectitud y fervorosa dedicación a aliviar el sufrimiento humano. Los 56 años, que vivió José Gregorio Hernández Cisneros, su trayectoria como médico, académico, religioso y la insólita circunstancia de su muerte, han legado a los venezolanos una devoción que rebasa las centurias. El joven estudioso del siglo XIX, el sabio y religioso del siglo XX, en el camino a ser santo de los venezolanos, en el XXI. Después de su muerte en 1919, se le han atribuido numerosas milagros de curación de enfermedades, especialmente entre los desposeídos, por lo que se le llama “el médico de los pobres”. La fama de sus favores no sólo limita en Venezuela sino que extiende a numerosos países latinoamericanos. José Gregorio Hernández nació en Isnotú, Estado Trujillo, Venezuela, el 26 de octubre de 1864. Sus padres, Benigno Hernández Manzaneda y Josefa Antonia Cisneros, eran propietarios de una tienda donde se vendía desde pequeños comestibles hasta géneros y perfumes. El padre, además de comerciante era boticario; y más allá de expender los ungüentos, las hierbas y los elíxires medicinales, diagnosticaba a los enfermos y los recetaba. José Gregorio se graduó de médico en la Universidad Central de Venezuela, después emprendió viaje al París para seguir cursos de posgrado. Durante su trayectoria profesional el doctor Hernández fue reconocido como “El Pasteur venezolano”. El fue el primer venezolano en realizar investigaciones microscópicos, cultivos bacterianos y vivesecciones. Gracias a sus trabajos, la ciencia médica venezolana entró de lleno en una etapa de verdadero renacimiento.
José Gregorio Hernández era conocido por sus contemporáneos por su singular talante científico, de gran maestro y de médico especialmente sagaz en el diagnóstico, pero más de todo, a su fina sensibilidad. Se ha dicho que asistía a enfermos sin importarle hora o distancia, que cumplía por igual con quienes tenían dinero para pagar sus servicios, y con quienes no podían pagarle.
El galeno era profundamente creyente y tenía marcada vocación sacerdotal. Una vez el decidió ingresar a una orden religiosa y para ello viajó a Europa. Logró entrar en la congregación de los cartujos pero estuvo poco tiempo. Su delicada salud no le permitía practicar las severas disciplinas que impone este tipo de organización religiosa. En este lugar, en la pastoreña esquina de Amadores, en Caracas, el 29 de junio de 1919 José Gregorio murió entre las ruedas de un automóvil. La Pastora es una de las parroquias más antiguas de Caracas. Allí tenía su consultorio el doctor José Gregorio Hernández.
El doctor iba a farmacia a comprar las medicinas para una enferma y en el momento en que salía de la farmacia, el fue a cruzar la calle por delante del tranvía que se encontraba detenido, sin percatarse de que un automóvil se acercaba en esa dirección. El automóvil desplazaba a 30 km por hora, velocidad excesiva para la época. El doctor Hernández recibió el fuerte impacto y murió al fracturársele el cráneo cuando cayó sobre la acera, y se convirtió así en la primera persona arrollada por un automóvil en la ciudad de Caracas.



La noticia de su muerte fue trasmitida por toda Caracas en cuestón de minutos y el número de personas que se presentó a ofrecer sus últimos respetos al doctor Hernández fue muy grande. Los restos del José Gregorio fueron trasladados en hombros desde el parafino universitario hasta el templo catedralicio y de allí al cementerio General del Sur. La población gritaba: “ El doctor Hernández es nuestro”, “Ha muerto un santo”. A partir de entonces, la veneración surgió espontáneamente en el pueblo, quien tomó como su imagen tutelar y protectora la del “Médico de los pobres”. Se le considera el personaje más popular entre los venezolanos. Prueba de ello es la variedad de retratos, estampas e imágenes que hay de él en los hogares a lo largo y ancho del país, además de la cantidad de personas que bautizan a sus hijos con su nombre. En toda Venezuela y en gran parte de Latinoamérica se le dedican rezos y se le hacen solicitudes. Miles de personas le dan las gracias por favores recibidos.
El 23 de octubre de 1975, luego de un incendio provocado por las llamas de las velas sobre su tumba, los restos de José Gregorio Hernández fueron trasladados al batisterio de la Iglesia de la Candelaria, en Caracas. Desde entonces, cada día se celebra una misa en su nombre a las 6:00 p.m. Allí, los devotos del doctor piden, frente a sus restos, salud, trabajo y arreglos conyugales.
CANONIZACIÓN
La Iglesia Católica Apostólica Antigua del Río de la Plata y el Patriarcado Católico de la Comunión Apostólica Ecuménica, Presididos ambos por el Patriarca Su Beatitud Monseñor + ++ Sebastián Camacho Bentancur, lo ha canonizado con todos los honores, con la legitimidad de 5 milagros comprobados.



En la Catedral Patriarcal Veterocatólica de Montevideo se erige el Santuario Nacional de San José GregorioHernández, en donde los últimos sabados de mes se agolpan los devotos del santo para dar las gracias y solicitar sus favores.




Santuario Veterocatólico de San José Gregorio Hernández
Calle: Bulgaria 3848 esq. Suecia
Frente al Cementerio del Cerro.
Montevideo -URUGUAY


Misas de Sanación en honor de San José Gregorio Hernández
2009

FIESTA DEL SANTO
29 DE JUNIO
CONMEMORACIÓN DE LOS 90 AÑOS
DE SU NACIMIENTO AL CIELO
1919-2009
MISA SOLEMNE
SÁBADO 27 DE JUNIO
HORA 17:30
ENERO - Sábado 31 Hora: 18:00
FEBRERO- Sábado 28 Hora: 18:00
MARZO -Sábado 28 Hora :18:00
ABRIL - Sábado 25 Hora : 17:30
MAYO - Sábado 30 Hora : 17:30
JUNIO - Sábado 27 Hora : 17:30
JULIO - Sábado 25 Hora : 17:30
AGOSTO - Sábado 29 Hora: 17:30
SETIEMBRE - Sábado 26 Hora: 17:30
OCTUBRE - Sábado 31 Hora: 17:30
NOVIEMBRE - Sábado 28 Hora 18:00
DICIEMBRE- Sábado 26 Hora 18:00